¿Gestionar alquileres de forma autónoma o contratar a un administrador?
Administrar propiedades puede implicar ciertos costos, y elegir la opción adecuada dependerá del tiempo, conocimientos y control que el propietario quiera tener.
Los costos de gestión de alquileres
Administrar alquileres puede conllevar algunos costes asociados, como contratar un asesor que presente las declaraciones de IVA o retenciones y que lleve la contabilidad, si el tenedor es una sociedad. Además, si el propietario quiere gestionarse de manera autónoma sus alquileres, es recomendable utilizar un programa para controlar los alquileres, especialmente si se gestionan varias propiedades; alternativamente, puede contratar a un administrador profesional que se ocupe de todo.
Gestión autónoma con software especializado
Si un propietario quiere encargarse directamente de la gestión de su propiedad, pero busca una solución tecnológica que facilite las tareas, existen múltiples opciones de software en el mercado. Estos programas permiten gestionar contratos, pagos, facturas, y comunicación con inquilinos. El costo depende habitualmente del número de propiedades a administrar, pero podemos decir que para unas 10 propiedades el costo es de aproximadamente 40€ – 70€ mensuales.
Es importante evaluar las funcionalidades que ofrece cada software, así como el soporte que ofrece cada empresa. Generalmente, estos programas ofrecen funciones como la gestión de pagos de alquiler, el registro de inquilinos, y la generación de facturas. Las versiones más avanzadas incluyen funciones adicionales como recordatorios automáticos, integración con plataformas de pago y contabilidad, etc. Algunas empresas también ofrecen atención personalizada por expertos del sector.
Gestionar de manera autónoma los alquileres requiere de unos ciertos conocimientos legales y administrativos previos y obliga al propietario a responsabilizarse de las tareas diarias, pero ofrece las ventajas de tener un control total sobre la gestión y ahorrar en comisiones de terceros.
Tener un software ayuda a automatizar las tareas tediosas y repetitivas y a mejorar el control, a cambio de un importe que poco relevante respecto al alquiler. Es importante seleccionar una aplicación pensada específicamente para propietarios, sin las complicaciones adicionales que conllevan los programas de administradores profesionales. También es recomendable que, si el propietario no es un experto inmobiliario, tener acceso a servicios de asesoría que puedan resolver dudas legales o de procedimiento.
Contratar a un administrador profesional de alquileres
Otra opción es contratar a un administrador de propiedades, lo que puede liberar al propietario de la mayoría de las responsabilidades de la gestión diaria. Estos profesionales se encargan de la comunicación con los inquilinos, cobro de rentas, reparaciones, renovaciones de contratos, entre otras tareas.
Actualmente, la tarifa de administración es libre, aunque algunos profesionales ofrecen precios fijos, el costo habitual es una comisión de entre un 5% y un 10% del alquiler bruto mensual, negociables en función del volumen y la localización de las propiedades. Esto incluye la gestión completa de la propiedad, como cobros de rentas y gestión de reparaciones menores. Hay que tener en cuenta que la gestión de la propiedad no incluye servicios adicionales como la gestión de reformas o grandes reparaciones, procesos de desalojo, asistencia legal o comercialización de las propiedades.
Delegar la administración de los alquileres a un profesional minimiza la carga de trabajo del propietario y evita estar al día en las normativas legales a cambio de tener un menor control sobre la propiedad y tener unas comisiones recurrentes que afectan sensiblemente a la rentabilidad del alquiler.
Conclusión
Si un propietario tiene los conocimientos, el tiempo y la disposición de gestionar sus propiedades por sí mismo, una solución de software puede ser la opción más económica y eficiente. Si, por el contrario, el propietario prefiere delegar estas tareas, es preciso contratar a un administrador profesional de alquileres.