Qué hacer cuando tu inquilino no paga el alquiler
Si te encuentras en esta situación, es importante que tomes medidas y lo manejes con prontitud
Como propietario de un piso o de un inmueble de alquiler, los inquilinos morosos son un problema que puede ser difícil de gestionar, esto no sólo tiene un efecto negativo en tus finanzas, sino que también puede ser emocionalmente agotador. Aquí hablaremos de las opciones que tenemos, como proceder legalmente con un inquilino moroso.
Soluciones Amistosas
El primer paso es siempre intentar llegar a una solución amistosa con el inquilino. Lo primero será una llamada telefónica para averiguar la causa de este retraso.
Dependiendo de la impresión que tengamos del inquilino y de la garantía adicional que hayamos pedido, podremos elaborar un plan de pagos razonable si no puede pagar el importe total, concediendo un plazo más o menos largo para que regularice su situación.
Podemos comunicar al inquilino por mensaje, preferiblemente por burofax, la cantidad que debe y el plazo para abonarla.
Asegúrate de documentar los acuerdos alcanzados entre ambas partes por si surgen más adelante desacuerdos o disputas
Si la comunicación no funciona
Cuando la comunicación no ha surtido efecto es el momento de buscar asesoramiento legal sobre la mejor manera de proceder, para ello consulta con un abogado especializado en derecho de la propiedad.
Se puede proceder a interponer una demanda por impago. Si se realiza y el juez la admite, el inquilino tendrá 10 días para cubrir la deuda antes de que el proceso siga su curso.
Llegados a este punto, el inquilino deberá elegir entre afrontar la deuda, abandonar el inmueble o bien oponerse a la demanda.
Cuando no hay mas opciones….Desahucio
Si todo lo demás falla y el inquilino sigue negándose a pagar el alquiler, puede que tengas que considerar la posibilidad de emprender acciones solicitando el desahucio ante los tribunales.
Deberás tener presente que esta situación puede alargarse y ser agotadora, pudiendo llegar a durar 8 meses.
Con esta resolución recuperarás la vivienda, pero no siempre la deuda del alquiler pendiente, por lo que lo mejor es que nunca tengas que llegar a esta situación.